El calorcito veraniego pide a gritos que usemos texturas distintas a la hora de tejer. A partir de esa consigna, buscamos opciones estacionales para incorporar a nuestras propuestas de temporada. Ambas exquisitas, pero con distintas particularidades, queremos contarles más en detalle de nuestras bases con lino y seda, que son una maravilla para proyectos estivales.
La seda era una tarea que teníamos pendiente hace montones. Por supuesto que nos parece una fibra sofisticada, ultra suave y muy exclusiva, pero no queríamos tirarnos a la piscina hasta dar con una opción amigable con el medioambiente. Y ¡chan! Encontramos la Seda Bourette, que es una ma-ra-vi-lla. Nos enamoró por varios motivos, de partida porque es seda natural 100%. Pero también nos encanta que sea hilada a partir de los capullos de los gusanos de seda, ya abandonados por las nuevas mariposas. Eso implica que su proceso de producción es respetuoso con el entorno y que en algunos rincones del mundo sea conocida como “wild silk”. Y claro, si rescata parte de un proceso propio de la naturaleza.
Nuestra Seda Bourette es extremadamente suave y ligera, al igual que la seda convencional. También destaca por su transpirabilidad, otro atributo que la hace ideal para prendas de verano. Cuenta con un brillo sutil muy sentador, porque es justo lo que necesita tu proyecto para ser fuera de serie, sin perder elegancia. ¡Y la caída de las prendas ya tejidas es impactante! En cuanto al rendimiento, estamos asombradas de todo lo que da de sí esta fibra light fingering: los 560 metros que vienen por cada 100 gramos te permiten tejer un top precioso, fresco y cómodo con incluso una madeja, si eres talla M.
Respecto de la paleta de color, decidimos explotar el encanto natural de la Seda Bourette y teñirla en tonalidades súper variadas, pero todas con un toque de sofisticación. Como dictan las tendencias esta temporada, nuestra propuesta tiene muchos matices tierra, pero sin dejar fuera todo eso que nos encanta de la naturaleza: playas, cielo, vegetación, pétalos de flores y hasta montañas nevadas. ¡Demasiado inspiradas con este hilado! El resultado es una paleta de color que nos parece excepcional.
El segundo estreno veraniego Madejasur ya enamoró a la Pope Vergara, que diseño con él su precioso Divine Top. Si hace rato no te das una vuelta por la web, este es el momento, porque tenemos disponibles kits perfectos para tejerlo, que contemplan combinaciones únicas de hilado y mostacillas Miyuki. La base -100% natural y de grosor fingering- es Baby Alpaca Lino Seda. ¡Imposible más nobleza en una sola madeja! Este hilado es una verdadera bomba, porque cuenta con la primera esquila en la vida de la alpaca: ligera, transpirable y libre de lanolina (sustancia que en algunos casos provoca alergias).
La Baby Alpaca también es termorreguladora gracias a su estructura, lo que te permite mantenerte fresca en verano y no sentir frío si durante la tarde bajan las temperaturas. Cada hebra en esta base es 51% Baby Alpaca, a lo que se suma un 25% de lino. Nos pasa que, de sólo nombrarla, esa fibra nos traslada a la temporada de verano. El lino es ideal para enfrentar el calor
¿Sabían que puede absorber el 20% de su peso en humedad, sin mojarse? O al menos, sin que el tacto sea capaz de detectar esa humedad. Además, evapora tan rápido, que no nos enteramos. Más transpirable, imposible.
El mix de estas madejas lo completa un 24% de seda. Ya les contamos un poquito de las características de la seda, que en este caso aporta la cuota final de sofisticación a esta propuesta naturalmente suave, resistente y exclusiva. El colorido matiza mucha tonalidad intensa, pero a diferencia de la Seda Bourette, aquí incorporamos varios tonos ya clásicos, que pueden servirte para prendas de media estación y también una paleta más profunda, a juego con ese enfoque.
El broche de oro en relación a nuestras dos bases full verano, tiene que ver con su característica milenaria. Literal. Para que se hagan una idea, las evidencias más antiguas de lino hilado son responsabilidad de los mesopotámicos y datan de hace unos 34.000 años. ¡En serio! Las primeras técnicas conocidas del hilado de la seda son más modernas: aproximadamente 6.000 años atrás, en China. El resultado final, para nosotras, es que hoy mismo puedes elegir la opción que prefieras en la web y disfrutarla en tus palillos con proyectos de verano. En general son diseños rápidos de tejer, así que las prendas te pueden acompañar durante todas tus vacaciones.